Esta vez el temblor se registró en la región de Qinghai, en el centro oeste de China, con una magnitud de 7,1 grados en la escala de Richter.
Como consecuencia del sismo al menos 589 personas murieron y otras 10.000 resultaron heridas además se derrumbaron viviendas y escuelas y numerosas rutas quedaron cortadas por aludes.
Después del temblor de 7,1 grados se sucedieron tres réplicas más de 5,3, 5,2 y 5,8 grados. En la ciudad de Jiegu, cerca del epicentro, más del 85 por ciento de los edificios se derrumbaron.
“Hay heridos por todas partes en las calles –dijo el responsable gubernamental–. Como casi todas las casas son de madera y tierra, la mayoría se derrumbó.”
La Federación China para el Comercio informó que destinó 2 millones de yuanes para ayudar a los trabajadores de las zonas afectadas que sufrieron pérdidas económicas y daños como consecuencia del sismo.
En mayo de 2008, un sismo de 8 grados en la escala de Richter sacudió la vecina provincia de Sichuan y cerca de 90 mil personas murieron aplastadas por los escombros de los edificios derrumbados por el fuerte movimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario